¿FUE SIMON PEDRO EL CONDUCTOR DE LA COMUNIDAD JUDEOCRISTIANA DE JERUSALEN?
Simon Pedro |
En la homilía XXI de tiempo ordinario de este último domingo se leyó un
pasaje del Evangelio según San Mateo Cp. 16; 13-20 donde Jesús le dice a
Simón Pedro: “Yo también te digo, que tú eres Pedro y sobre esta roca edificare
mi iglesia; y las puertas del Hades no prevalecerán sobre ellas.” Haciendo un
estudio exegético de este evangelio nos viene la pregunta: ¿Fueron estas
palabras verdaderamente pronunciadas por Jesús? ¿Fundo Jesús una nueva iglesia
y cuya dirección encomendó a Simón Pedro? Porque si leemos el libro de Hechos
de los Apóstoles fue Jacobo o Santiago “el hermano del Señor” quien
verdaderamente dirigió la iglesia de Jerusalén esto lo observamos en Hch 15; 18-25
cuando en un concilio en la que es citado Pablo de Tarso para discutir sobre la
conversión de los paganos es Jacobo quien toma la decisión definitiva al
respecto como quien tiene la autoridad; asimismo en la última reunión que
tuvieron los jerarcas de la iglesia de Jerusalén con Jacobo a la cabeza
juzgando a Pablo por el hecho de no exigir a los judíos de la diáspora a circuncidarse
Jacobo dice: "21.Y hemos oído decir que enseñas a todos los judíos del
mundo pagano que se aparten de Moisés, que no circunciden a sus hijos ni vivan
según las tradiciones judías. 22. De todos modos se van a enterar de que has
llegado, y entonces ¿qué hacer? 23. Reuniremos la asamblea, y harás lo que te
vamos a decir. Hay entre nosotros cuatro hombres que han hecho un voto 24.y tú
los vas a apadrinar. Te purificarás con ellos y pagarás los gastos cuando se
hagan cortar el pelo. Así verán todos que es falso lo que han oído decir de ti
y que, por el contrario, tú también cumples la Ley. 25. En cuanto a los
creyentes de origen no judío, ya les hemos enviado instrucciones, pidiéndoles
que se abstengan de carne sacrificada a los ídolos, de la sangre y de la carne
de animales sin sangrar y de las relaciones sexuales prohibidas.»
Hago esta observación porque
Mateo en 16; 13-20 es el único que hace esta suerte de sucesión de Jesús hacia Simón Pedro; este
mismo pasaje narrado por Marcos, supuestamente el más cercano a los hechos, en 8;
29-30 después que Pedro le dice: Tú eres el Cristo. Jesús les manda que no
dijesen esto de el a ninguno; del mismo modo sucede en la narración hecha por
Lucas 9; 18-21. Ambos evangelistas no dicen nada sobre un supuesto nombramiento
a Simón Pedro como jefe de una nueva iglesia. Entre los tres evangelios
sinópticos el de Mateo parece el más manoseado por los copistas cristianos
latinos de entre los siglos II y III;
todo parece indicar que ha habido muchas interpolaciones de una o dos
plumas.
En primer lugar por el convencimiento
de que para tener una visión cercana a la verdad histórica de la existencia de
Jesús tenemos que ubicarlo en el contexto de un entorno eminentemente judío del
siglo I de nuestra era. Pues es consenso general entre los eruditos tanto
confesionales como no confesionales que
no podríamos entender el mensaje de Jesús si no aceptamos el hecho de
que él fue un galileo que profeso el judaísmo como su fe religiosa y que nunca
renuncio a esa fe. Esto lo corroboramos en el mismo evangelio de Mt. 5; 17-18
donde Jesús dice: “No penséis que he venido a abrogar la ley o los profetas; no
he venido para abrogar sino para cumplir. Porque de cierto os digo que hasta
que pasen el cielo y la tierra ni una jota ni una tilde pasara de la ley, hasta
que todo se haya cumplido” este dicho de Jesús seguramente fue fiel a su
pensamiento y que se transmitió a través del tiempo de una sólida fuente de
logias y dichos de Jesús que recogió el evangelista. Recordemos que los
escritos originales de Mateo no existen, no tenemos ni un pedacito de papiro de
este evangelio en el siglo I, todo lo que se ha encontrado son copias que corresponden
de mediados del siglo II y que son pequeños pedazos de papiros; el evangelio
completo recién lo tenemos con los códices Vaticanus y Sinaiticus en la segunda
mitad del siglo IV; más todo lo que
sabemos de los primeros escritos del evangelio de Mateo están testimoniados en
los primeros padres de la iglesia particularmente en Papias obispo de Hierapolis
(quien vivió entre el año 69 y 150 EC y fue discípulo de Policarpo quien conoció
a Juan el apóstol), y quien en un tratado de cinco libros titulado “Explicación
de los dichos del Señor” hace mención de las palabras de Jesús procedentes de
Aristión y otras tradiciones la de Juan el anciano quien le hiciera referencia de
los primeros escritos evangélicos de
Mateo, transcribiéndolos Papias en los siguientes términos: «Mateo compuso su
discurso (de Jesús) en hebreo y cada cual lo fue traduciendo como pudo». (Eusebio, Hist. Ecl. III, 39; 15-16). Entonces
el evangelio original de Mateo del siglo I fueron solamente logias o dichos de Jesús; muy diferente claro esta al evangelio tal
como lo tenemos en la actualidad ya que una cosa son sentencias y dichos de
Jesús y otra una recopilación biográfica de Jesús; lo que nos hace deducir que
en el transcurso de 200 años (recuérdese que en el año 350 EC se redactaron
todos los libros considerados canónicos
y que forman parte de la Biblia hasta la fecha) los monjes copistas han ido
agregándole narraciones tradicionales de
lo que hizo Jesús en vida y darle cuerpo narrativo a estas primeras sentencias,
con lo que quiero decir que los escritos
referentes a la vida pública de Jesús en
este evangelio no fueron necesariamente escritos por un testigo ocular, como lo
fue seguramente el apóstol Mateo.
En segundo lugar Jesús, a juzgar
por sus discursos en cada uno de los
evangelios sinópticos; fue un predicador imbuido de un mensaje
mesianista apocalíptico, que anunciaba la proximidad del reino de Dios; por
tanto no tenía necesidad de fundar religión nueva alguna ya que su prédica
estaba concordante con las profecías de los libros de la Tora y el Talmud. En
todo caso lo que Jesús quiso organizar fue una secta más de las tantas
existentes dentro del judaísmo; porque es bueno hacerles recordar que en el Judaísmo
del siglo I habían hasta cuatro sectas importantes, a saber la de los saduceos,
Los fariseos, les esenios y los zelotes; otras sectas secundarias serían los mandeos, los jasidin carismáticos, los
sicarius y los terapeutas. Todo hace
indicar que la secta que creo Jesús fue el de los Nazareos, pero entonces
deberíamos preguntarnos quienes eran los nazarenos; los “Netzarím” (en Hebreo) eran llamados así
quienes tomaban los votos a ser consagrados a Dios, esta tradición judía era un
acto individual y muy tradicional desde la época de los patriarcas; en el libro
de los jueces 13; 5 vemos que el mismo Dios eligió a un nazareo desde su
nacimiento: ”Pues he aquí que concebirás y darás a luz un hijo; y la navaja no
pasaras sobre su cabeza, porque el niño será nazareo a Dios desde su nacimiento
y el comenzara a salvar a Israel….” ¿A qué personaje bíblico se hace referencia
en este pasaje? Pues ni más ni menos que a Sansón; pero Jesús hace de esta
opción individual, una colectiva elevándolo a nivel de comunidad de nazareos o
judíos consagrados a Dios y la ley mosaica; porque la palabra Nazareno también
deriva de la expresión hebrea “Nazara” que quiere decir “estar en la verdad” Y Jesús
es llamado “La Verdad”: Juan 14:6 “Yo soy el Camino, la Verdad y la Vida”. Los creyentes en Jesús se proclaman
seguidores de “la verdad”: 1 Juan
3:19 “y en esto conocemos que somos de
la verdad, y aseguramos nuestros corazones delante de él”. En el evangelio
apócrifo Según Felipe, versículo 19 nos dice al respecto: “«Jesús» es un nombre
secreto, «Cristo» es un nombre manifiesto. Por eso «Jesús» no existe en lengua
alguna, sino que su nombre es «Jesús», como se le llama generalmente. «Cristo»,
sin embargo —por lo que toca a su nombre en siríaco—, es «Mesías». Y todos los
demás lo tienen asimismo con arreglo a la lengua de cada uno. «El Nazareno» es
el nombre que está manifiesto en lo oculto”.
Santiago o Jacobo el hermano del Jesus |
Para corroborar esto vayamos al
libro de hechos de los apóstoles continuando la lectura del capítulo 21 a que
hice referencia líneas arriba; cuando en
los versículos 23 y 24 Jacobo o Santiago el hermano del señor le ordena que
Pablo apadrina a unos jóvenes en un ritual de iniciación Netzarim; estando
Pablo en el templo para cumplir con este cometido es cuando es rodeado por
muchos judíos que lo reconocieron y quisieron apedrearlo acusándolo de hereje,
es cuando hace su presencia un tribuno romano llamado Lisias a quien le llamo
la atención la trifulca que se produjo frente al Templo; como Pablo le
confesase su ciudadanía romana el tribuno lo llevo ante el gobernador Félix;
quien oyendo la defensa de Pablo convoco
al sacerdote Ananías y los principales ancianos para que comparecieran ante se
presencia e hicieran la acusación contra Pablo; entonces Ananías empezó diciendo:
“Porque hemos hallado que este hombre es una plaga, y promotor de sediciones
entre todos los judíos por todo el mundo y cabecilla de la secta de los
Nazarenos” (Hch 24; 25). Como se puede apreciar las principales autoridades
judías conocían al movimiento de los seguidores de Jesús como Nazarenos. Aquellos
que tomaban el nazaerato de por vida nunca pasaban navaja sobre su cabellera
¿Por qué razón ilustramos la figura de Jesús con la cabellera larga? Ninguna de
las crónicas evangélicas describe físicamente como era Jesús, sin embargo en
algún momento en que se iban formando varias congregaciones en torno de la
figura de Jesús algún artista cristiano de comienzos del siglo II dibujo a
Jesús con las características físicas
conocidas actualmente, seguramente porque aún existía la tradición que Jacobo o
Santiago el hermano del señor fue un Nazareno y que nunca se cortó la
cabellera.
¿EXISTIO LA CIUDAD DE NAZARET EN TIEMPOS DE JESUS?
Continuando respecto a porque
decían a Jesús el Nazareno, Les referiré que no era por el hecho de haber
nacido en algún lugar llamado Nazaret. Los monjes copistas latinos de los
siglos II y III al traducirlos del
arameo (lengua en el que seguramente se escribió el original evangelio de
Marcos), del hebreo (en el que se escribió el original del evangelio de Mateo)
y del griego (lengua en él se
escribieron los evangelios de Lucas y Juan) al latín los evangelios de Marcos, Mateo,
Lucas y Juan interpretaron muchas vocablos
erróneamente por ejemplo al traducir Jesús Nazareno, ellos supusieron
que se referían por la procedencia del lugar donde creció Jesús; ya que no
tenían conocimiento de los lugares y costumbres de los Judíos y galileos del
primer siglo, pues en la época en que
ellos vivieron ya no existían los palestinos judíos como nación debido a que
después de la última revuelta judía el año 135 EC dirigido por Simón Bar Kojba,
el emperador Adriano desterró a todos los judíos sobrevivientes a diferentes
lugares del imperio (lo que fue llamado como la diáspora judía) haciendo de
ellos una nación sin tierra por cerca de veinte siglos. Es bien sabido que
Nazaret como ciudad no fue conocida en el siglo I, si uno revisa “el Antiguo
Testamento (que era tan locuaz en cuanto a la geografía), los escritos del
historiador Judío Flavio Josefo, el Talmud o los manuscritos de Mar Muerto
ninguna habla de ella. No aparece sino hasta los manuscritos de los evangelios
oficiales; es decir en el siglo IV EC.
(pág. 91 “Jesús o el Secreto Mortal de Los Templarios por Robert Ambelain,
Ediciones Martínez Roca, Barcelona 1982); por esta razón los actuales
historiadores suponen que Nazaret al no ser una ciudad importante en el siglo I
seguramente fue un pequeño villorrio de campesinos que albergaba a unas cuantas
familias y si Jesús nació y creció allí debió haber sido un campesino iletrado
o analfabeto (John Diminic Crossan “Jesús de Nazaret; una vida revolucionaria”;
Reza Aslan “EL ZELOTE, La vida y la época de Jesús de Nazaret” y John P. Meier “Jesús
un judío marginal”) y toda esa conceptualización religiosa e ideológica que
concibió y creo se debió a su extraordinaria capacidad intuitiva; sobre este
aspecto no puedo estar de acuerdo, coincido con los planteamientos de Daniel
Masse y Robert Ambelain en que seguramente Nazaret no existió en el siglo I. Existen
dos teorías por la cual se establece a Nazaret como el lugar donde creció Jesús
la primera es por lo expuesto líneas arriba, es decir por desconocimiento de
los monjes copistas al interpretar este vocablo y la segunda teoría establece
que más bien se trató de ocultar el verdadero origen de Jesús para evitar
futuras represalias contra sus descendientes
o sea se inventó la ciudad de Nazaret.
Hay una escena en Lc. 4. 16-30 cuando Jesús regresa a la tierra donde
creció y en día de reposo asistió a la sinagoga de la ciudad donde se le dio el
libro del profeta Isaías (Is. 61. 1-2)
al final de la lectura enrollo el libro y dijo: “Hoy se ha cumplido esta
escritura delante de ustedes” muchos se maravillaban mientras otros dudaban y
se decían entre si incrédulos: “este no es acaso el hijo de José”;
inmediatamente Jesús replico que seguramente le dirán: “…de muchas que hemos
oído que se han hecho en Capernaum, haz también aquí en tu tierra.” ”De cierto
os digo que ningún profeta es acepto en su propia tierra.” “Al oír estas cosas
todos en la Sinagoga se llenaron de ira; y levantándose, le echaron fuera de la
ciudad, y le llevaron hasta la cumbre del monte sobre el cual estaba edificada
la ciudad de ellos, para despenarlo. Mas
el paso por medio de ellos y se fue”; este pasaje bíblico merece un análisis
respecto al supuesto lugar de procedencia de Jesús, en primer lugar si era un
pequeño villorrio era improbable que existiera allí una sinagoga ya que ella
solamente se construía en las grandes ciudades, en segundo lugar en el pasaje
aludido la ciudad en mención se ubica sobre una colina, veamos lo que nos dice
Robert Ambelain al respecto: “Esta escena implica la presencia inmediata a
pocos pasos, de un precipicio o de un profundo barranco cortado a pico. Salen de la Sinagoga empujando delante de
ellos al hereje con la intención de conducirlo al parapeto y precipitarlo al
vacío. Pero en la Nazaret actual semejante cosa es propiamente hablando,
totalmente imposible, porque esta aldea está situado en la suave pendiente de
una colina al suroeste de un amplio circo de
cimas blondamente redondeadas. Además esa Nazaret está situada en un pliegue
del terreno, por consiguiente no hay precipicios ni barrancos y el horizonte es
allí reducido, de modo que es imposible sonar con precipitar a nadie a ningún
vacío.” (pag.92 “Jesús o el Secreto Mortal de Los Templarios”). Entonces nos
preguntamos ¿Dónde queda la ciudad a la que se hace referencia en este pasaje
de Lucas? Si uno hace un tours por todas las ruinas antiguas alrededor del mar
de Galilea, existentes en la actualidad descubriría esta ciudad en las ruinas
de Gamala.
Saulo de Tarso |
Saulo de Tarso o San Pablo, que
no conoció a Jesús, en todas sus cartas solamente hace referencia de un
personaje etéreo y pregona la salvación divina de los pecados a través de la fe
en cristo Jesús porque “el hombre es justificado por fe sin las obras de la ley”
(Ro. 3;28) “…el hombre no es justificado por las obras de la ley, sino por la
fe de Jesucristo, nosotros también hemos creído en Jesucristo, para ser
justificados por la fe de Cristo y no por las obras de la ley, por cuanto por
las obras de la ley nadie será justificado.” (Ga. 2; 16). Pablo en su prédica a
los gentiles para que se conviertan a la nueva fe desjudaiza el verdadero
mensaje de Jesús”. Las desavenencias de Pablo con los discípulos de Jesús, eran
continuas y Pablo para darse cierta importancia inventa la visión y el llamado
de Jesús quien le confiere el apostolado para que difunda su mensaje a los
paganos y por si fuera poco reniega de los discípulos en 2 Corintios 11, 12-13
cuando dice: “Mas lo que hago, lo hare aun, para quitar la ocasión a aquellos
que la desean, a fin de que en aquello de que se glorían, sean hallados
semejantes a nosotros.” “Porque estos son falsos apóstoles, obreros
fraudulentos, que se disfrazan de apóstoles de cristo.” Ya anteriormente Jacobo
o Santiago el hermano del señor, había enviado a algunos discípulos a los
lugares donde Pablo había organizado nuevas comunidades para constatar si sus
enseñanzas estaban de acuerdo a lo que habían dispuesto los apóstoles según
el legado de
Jesús (Hch 15), esto molesto mucho a Pablo tanto así que en Gálatas 2,
4-6; dice: “y esto a pesar de los falsos hermanos introducidos a escondidas,
que estaban para espiar nuestra libertad que tenemos en Cristo Jesús, para
reducirnos a esclavitud, a los cuales ni por un momento accedimos a someternos,
para que la verdad del evangelio permaneciese con vosotros. Pero de los que
tenían reputación de ser algo (lo que hayan sido en otro tiempo nada me
importa; Dios no hace acepción de personas) a mí los de reputación nada nuevo
me comunicaron.” Esto indudablemente va dirigido a los apóstoles dirigidos por
Santiago. Es indudable que la comunidad dirigida por Santiago, dentro de ellos
todos los discípulos de Jesús; no se apartaron de la ley mosaica; creyeron en
la misión mesiánica de Jesús; pero para justificar su inesperada muerte y el no
cumplimiento su reinado mesiánico, proclaman su resurrección y su segunda
venida para reinar Jerusalén como cumplimiento profético y ellos también creían
que esto sería pronto; tal como Jesús predicó:
“De cierto os digo que no pasara esta generación hasta que todo esto
acontezca”(el fin de los tiempos) Mc. 13;30. Todo lo dicho es argumento
suficiente para pensar que el Jesús histórico nunca tuvo intensiones de fundar
una nueva religión.