Sunday, April 19, 2015

VERDADES Y MISTERIOS SOBRE EL JUICIO, PASION Y MUERTE DE JESUS


 ¿Existio en realidad el juicio de Jesus de parte de Sanedrín?
Uno de los acontecimientos más importantes para la fe Cristiana es sin  lugar a dudas la pasión, muerte y resurrección de Jesús; lo cual constituye la base fundamental de su dogma y en torno el cual giran todos los fundamentos de la construcción teológica de la religión cristiana en cada una de sus facciones en las que se ha dividido a través del tiempo. Sin embargo haciendo un análisis histórico de los hechos fuera de toda influencia de corte religioso vemos ciertas inconsistencias sobre los acontecimientos que desencadenaron en el juicio y sentencia de muerte de Jesús narrado por los evangelistas canónicos. Los cuatro evangelistas coinciden que Jesús fue acusado por el Sanedrín por delito de blasfemia; “El sumo sacerdote le volvió a preguntar, y le dijo ¿Eres tú el Mesías, el hijo del Dios Bendito?  Jesús le dijo: Yo soy; y veréis al hijo del hombre sentado a la diestra del poder de Dios, y viniendo en las nubes del cielo. Entonces el sumo sacerdote rasgándose las vestiduras, dijo: ¿Qué más necesidad tenemos de testigos? Habéis oído la blasfemia, ¿Qué os parece?   Todos ellos le condenaron declarándole ser digno de muerte.” (Mc 14, 61-64).   En primer lugar vamos a definir que era el Sanedrín, por que no olvidemos que Jesús ante todo profesó la fe del judaísmo, vivió como un judío, adopto todas las costumbres del pueblo judío de su época y no era ajeno al entorno en el que vivieron los judíos de su época, la de ser un pueblo sometido por el imperio romano; por tanto si queremos saber sobre la verdad histórica de la vida de Jesús no podemos pasar por alto estos aspectos fundamentales como la de las instituciones que regían las normas religiosas y jurídicas del pueblo judío de su época.

El Sanedrín
Era un consejo administrativo nacional y un tribunal supremo especializado en la interpretación de la ley judía, era un tribunal compuesto por 71 personas presidida por el sumo sacerdote con autoridad para atender asuntos de importancia nacional, como interpretación y cambios de algunos asuntos de índole religiosa, de jurisprudencia civil o tratar con jueces que cuestionaban sus decisiones en asuntos relacionados con la fe judía y  el juzgamiento a personas consideradas herejes. Los miembros del Sanedrín se juntaban todos los días en un edificio conocido como el Salón de Piedras Talladas ubicado al norte del Monte del Templo, con excepción de los sábados y los días festivos. Las sesiones se empezaban generalmente en horas de la mañana hasta la terminada la tarde, nunca lo hacían de noche ni mucho menos en horas de la madrugada; así que solo se celebraban juicios durante el día. Además, como las sentencias de muerte no se dictaban el mismo día del juicio, sino el siguiente, estos casos no se juzgaban la víspera de un sábado ni de una fiesta. También se advertía seriamente a los testigos sobre la gravedad de derramar sangre inocente. Los romanos dejaban en plena libertad a los pueblos subyugados a continuar con sus leyes nacionales y además respetaban sus creencias religiosas lo que si les interesaba era que pagasen puntualmente sus impuestos al imperio y que sus autoridades locales mantuvieran la paz; los juicios de las autoridades locales a sus congéneres  por conceptos de sus propias leyes sean estas por desataco religioso o cualquier delito que no atentara contra la autoridad del imperio eran permitido por los prefectos romanos incluso la pena de muerte sentenciada por las autoridades locales salvo aquellos delitos graves como subversión en contra del imperio o delitos de robos precedidos de muerte por grupos de salteadores que pululaban en las caminos solitarios hacia las ciudades, solo en esos casos la pena de muerte tenía que dar el prefecto romano. Bueno conociendo el orden establecido entre las cúpulas gobernantes de los pueblos sometidos al imperio romano  vamos a analizar los elementos jurídicos que sirvieron para condenar a Jesús desde el punto de vistas de los hechos narrados por los evangelios canónicos.  La afirmación de que la situación jurídica de toda palestina en la época en la que estaban sometidas bajo la jurisdicción del imperio romano era muy limitada y que no se les  permitían aplicar la pena de muerte a sus nacionales, como se nos hace saber en los propios textos canónicos, carece de credibilidad por lo expuesto líneas arriba, pues en el evangelio de Juan cuando Caifas y los suyos llevan a primera hora de la mañana del día viernes en vísperas de la Pascua judía, ante el Prefecto romano Poncio Pilatos y él les pregunta: “ ¿Qué acusación traéis contra este hombre?. Respondieron y le dijeron: Si este no fuera malhechor no te lo habríamos entregado.  Entonces les dijo Pilatos: Tomadle vosotros y juzgadle según vuestra ley. Y  los Judíos le dijeron: A nosotros no nos está permitido dar muerte a nadie.”(Jn 18, 29-31). En este pasaje vemos dos aspectos no tan claros, en primer lugar Poncio Pilatos como Prefecto romano sabía muy bien cual eran sus facultades y cuales los derechos de las autoridades de los pueblos sometidos por el imperio por eso les dice “Juzgadle según vuestra ley” ya que ve que el caso de Jesús según las acusaciones de los miembros del sanedrín no merece su atención urgente y necesaria para los intereses de Roma; en segundo lugar los judíos le dicen que no les está permitido dar muerte a nadie, si yo fuera un  prefecto romano interpretaría esta respuesta como un insulto a mi inteligencia, ya que si les estaba permitido sentenciar y ejecutar a la pena de muerte por apedreamiento en caso de blasfemia; en los evangelios mismo vemos casos donde  las turbas a la cabeza de  algún dirigente fariseo o  saduceo, actúan como si pudieran ejecutar la pena de muerte de una persona, sin temor alguno a las consecuencias jurídicas del acto, como ejemplo podemos leer la muerte de Esteban en Hechos de los apóstoles (Capitulo 7; 1-60 )juzgado por el Sanedrín por blasfemia y condenado a muerte por lapidación . Otro aspecto a tomar en cuenta es que los juicios que eran llevados a cabo por el Sanedrín no eran procesos muy sumarios como nos lo hacen saber en los evangelios canónicos muy por el contrario, eran procesos jurídicos algo complicados, me tomare la libertad de transcribir algunos textos del capítulo 9 de la obra titulada “Memorias del Calvario” del pastor adventista Taylor Bunch, en su afán de demostrar las transgresiones jurídicas de los miembros del sanedrín en el juicio de Jesús y además nos detalla en forma pormenorizada como actuaba esta institución en función a sus tradicionales normas de la siguiente manera: “En la jurisprudencia hebrea no se ahorraba esfuerzo alguno para preservar y proteger la vida humana, dada su pertenencia a Dios. La Mishna declara que "el sanedrín que condena a hombres a la muerte con la frecuencia de un caso cada siete años, es un matadero"...Estas eran otras máximas recogidas en la Mishna: "La vida del hombre pertenece a Dios, y solamente de acuerdo con la ley de Dios es posible disponer de ella". "Quien preserva una vida digna es tan meritorio como si hubiera preservado al mundo". A fin de garantizar la justicia al acusado, la argumentación había de iniciarse a favor de él. No se permitía ningún dicho en su contra, hasta que al menos uno de los jueces hubiera hablado en favor de él. En caso de un proceso capital que se resolviera de forma condenatoria, no se podía pronunciar sentencia sino hasta la tarde del segundo día. Después de la primera condenación, los jueces abandonaban la estancia de la roca esculpida y se reunían en grupos de cinco o seis para comentar el caso. Posteriormente se iban a casa de dos en dos, brazo con brazo, en procura aún de argumentos en favor del acusado. Después de la puesta del sol se buscaban unos a otros para considerar una vez más el caso, y para orar en procura de la guía divina. El día siguiente había de ser de ayuno y oración; no se debía comer hasta tanto el caso hubiera quedado decidido. Tras el sacrificio de la mañana los jueces se volvían a reunir y examinaban detalladamente la evidencia.  Se permitía que los jueces cambiaran su voto en favor del acusado, pero nunca en su contra. El sanedrín deliberaba todo el día hasta casi la puesta del sol, momento en el que se tomaba por fin el voto. Si una vez más se declaraba culpable al acusado, los testigos lo conducían a la ejecución mientras que el sanedrín permanecía en sesión. Un hombre que llevaba una bandera roja se situaba a la puerta del recinto, y otro montado a caballo seguía a la procesión, llevando también una bandera roja. Este último proclamaba ante la atenta multitud que si alguien conocía alguna evidencia a favor del prisionero debía venir y declararla. Si alguien aportaba alguna nueva evidencia, se detenía la procesión y se hacía ondear la bandera para anunciar a la guardia situada junto a las puertas del recinto que el prisionero era conducido de nuevo al sanedrín para ser sometido a un nuevo proceso. Por otra parte, si mientras se llevaba al prisionero al lugar de la ejecución una persona acudía al lugar de reunión del sanedrín con nueva evidencia favorable al acusado, el hombre apostado a la puerta del recinto hacía ondear su bandera roja haciendo que la procesión se detuviera, y los testigos traían de regreso al prisionero para una nueva audiencia.”  

¿En realidad se llevó a cabo un juicio a Jesús en el Sanedrín?

Por lo expuesto líneas arriba todo hace suponer que el juicio de Jesús por el Sanedrín reunidos en horas de la madrugada no es histórico, por  lo que los redactores finales de los evangelios canónicos (esto es entre los siglos II y IV, que por lo general eran los monjes copistas cristianos latinos), desconocían de las leyes judías, e incluyeron estos pasajes a los textos originales que no necesariamente fueron escritos por los autores a que se hacen referencias; John Dominic Crossan   Profesor de Estudios Bíblicos de la Universidad De Paul, Chicago y miembro del Seminario de Jesús, es considerado como un erudito en historiografía del Nuevo Testamento y autoridad en el  estudio definitivo sobre la vida de Jesús escribiendo libros como  “El Jesús Histórico” (1991) “Jesús: Una Biografía Revolucionaria” (1992)  y “Jesús Esencial” (1994) manifestó en una entrevista que: “Los testimonios de los cuatro evangelios sobre el Juicio de Jesús no son testimonios periodísticos ni de testigos oculares de lo que sucedió en el año 30 EC.” Debemos recordar que los cuatro evangelios canónicos se escribieron de entre los años 70 y 100 EC, siendo el primeros de ellos el de Según San Marcos; sin embargo a la fecha no tenemos en existencia ni un pedazo de papiro de los escritos originales de ninguno de estos textos evangelicos del siglo I y  el más antiguo encontrado hacia la segunda mitad del siglo XIX  E.C. consiste en un pequeño pedazo de papiro que recoge unos breves pasajes del Evangelio de Juan. Este papiro es conocido como P52 y se encuentra en la actualidad en la Biblioteca de John Rylands de Manchester, su datación es de entre los años 125 y 150 E.C. y está escrito en el anverso y el reverso y en él se puede identificar pasajes de  parte de Jn. 18, 31-33, a saber: “[…] los judíos: «Nosotros no podemos dar muerte a nadie.» Así se cumpliría lo que había dicho Jesús cuando indicó de qué muerte iba a morir.  Entonces Pilato entró de nuevo al pretorio y llamó a Jesús y le dijo: « ¿Eres tú el rey de los judíos?»”. Y en el reverso, parte de Jn. 18, 37-38, a saber:   “[…] soy rey. Yo para esto he nacido y para esto he venido al mundo: para dar testimonio de la verdad. Todo el que es de la verdad, escucha mi voz.»  Le dice Pilato: « ¿Qué es la verdad?» Y, dicho esto, volvió a salir hacia los judíos y les dijo: «Yo no encuentro ningún delito en él”. Está escrito en griego  y es posible que se trate de una primera copia del original que podría haber sido escrito a finales del siglo I, definitivamente no por el apóstol Juan, en todo caso podría tratarse de algún discípulo muy helenizado  de este; cuando las primeras comunidades judío cristianas ya habían tomado distancia de la fe Judía  antes de la Diáspora del pueblo Judío en el año 135 después de la guerra contra los romanos dirigida por Simón Bar Kojba; los miembros del sanedrín perseguían y ejecutaban a los seguidores de Jesús por delito de blasfemia; por tal razón los cristianos del siglo II por encono en contra de los judíos los culpan directamente como los ejecutores de la muerte de Jesús. No tenemos la certeza exacta de que los evangelios tanto de Mateo como el de Marcos tal como lo conocemos en la actualidad sean copias fidedignas de los originales, esto lo corroboramos a través de la obra de Eusebio de Cesárea (Historias Eclesiásticas Libro III Capitulo XXXIX, versículos 14-16) quien nos hace mención que Papias, el obispo de Hieropolis, (quien vivió hacia el año 150 EC)  escribió en sus anales que tuvo en su poder los primeros escritos atribuidos a Marcos y Mateo  en los siguientes términos: “En sus escritos Papias expone explicaciones de las palabras del señor procedentes de Aristrion y otras tradiciones de Juan el anciano. Todos estos se los recomendamos a cuantos deseen instruirse. Ahora debemos añadir a sus palabras ya citadas, una tradición referente a Marcos, el que escribió el evangelio. Se expresa así: Y el anciano decía lo siguiente: Marcos, que fue  intérprete del apóstol Pedro, escribió con exactitud todo lo que recordaba, pero no en orden de lo que el señor dijo e hizo. Porque él no oyó ni siguió personalmente al señor, sino, como dije, después a Pedro. Este llevaba a cabo sus enseñanzas de acuerdo con las necesidades, pero no como quien va ordenando las palabras del señor, más de modo que Marcos no se equivocó en absoluto cuando escribía ciertas cosas como las tenía en su memoria. Porque todo su empeño lo puso en no olvidar nada de lo que escucho y no escribir nada falso.  Esto relata Papias referente a Marcos. Sobre Mateo dice: Mateo compuso su discurso (de Jesús)  en hebreo y que cada cual lo fue traduciendo como ha podido”, seguramente en este último caso Papias tenía ya en su poder escritos atribuido a Mateo en Griego diferentes en su interpretación al supuesto original del Mateo escrito en Hebreo; como sea se puede apreciar que estos escritos visto y estudiados por Papias hacia el año 125 EC son totalmente diferente a los escritos evangélicos tal como los conocemos en la actualidad, además lo que dice Papias es que el documento de Mateo que tenía a la vista solamente eran sentencias o dichos de Jesús y como tales estos  escritos son diferentes al evangelio Segun San Mateo tal como lo tenemos en la actualidad ya que una cosa son sentencias y dichos de Jesús y otra una recopilación biográfica de Jesús lo que nos hace pensar que en el transcurso de doscientos años cuando fueron redactados definitivamente como parte del canon en el año 350 EC; los monjes copistas que fueron transcribiendo estos documentos agregaron tradiciones existentes de otras fuentes no necesariamente históricas.

 Si en realidad el juicio del sanedrín contra Jesús hubiera sido un hecho histórico este proceso se hubiera diferido para el primer día después de la celebración de la pascua judía, porque como se nos narra en los evangelios canónicos Jesús fue apresado en la madrugada del día viernes víspera de la celebración de la pascua; lo que hacía imposible la convocatoria del sanedrín en la mañana no les estaba permitido de acuerdo a sus costumbres. De haber sido cierto el juicio contra Jesús de parte del sanedrín esta se hubiera efectuado después de las fiestas de pascua y si la sentencia hubiera sido la pena máxima por delito de blasfemia esta se hubiera ejecutado inclusive dos días después y por apedreamiento  o lo que se llama la “ley de  Lynch” (linchamiento); sino recordemos lo que Lucas nos narra en Hechos de Los Apóstoles respecto al juicio contra Esteban, que ya mencioné líneas  arriba,  de parte del sanedrín acusado de blasfemia, en su defensa Esteban dice: “He aquí veo los cielos abiertos, y al hijo del hombre que está a la diestra de Dios”. Entonces ellos, dando grandes voces, se taparon los oídos, y arremetieron a una contra él. Y echándole  fuera de la ciudad le apedrearon; y los testigos pusieron sus ropas a los pies de un joven que se llamaba Saulo. Y apedreaban a Esteban mientras el invocaba y decía: Señor Jesús recibe mi espíritu.” (Hch 7, 56-59), aun cuando se nos narra un juicio con muchas irregularidades en su procedimiento, lo cierto es que se nos dice claramente  que la ejecución de la pena de muerte de las autoridades locales no estaba restringida, como se nos hace  saber en el caso de Jesús.        

¿Cuáles fueron las verdaderas causas del arresto de Jesús?


Las verdaderas causas del arresto de Jesús de parte de las autoridades romanas esta en los sucesos descritos en los evangelios canónicos como “la purificación del Templo” de parte de Jesús, días previos a la Pascua judía, veamos: “Vinieron, pues, a Jerusalén; y entrando Jesús en el Templo comenzó a echar fuera a los que vendían y compraban en el templo; y volcó las mesas de los cambistas, y las sillas de  los que vendían palomas; y no consentía que nadie atravesase el templo llevando utensilio alguno.  Y les ensenaba diciendo: ¿No está escrito ‘Mi casa será llamada casa de oración para todas las naciones’? Mas vosotros las habéis hecho cueva de ladrones.” (Mc. 11, 15-17) (Mt. 21, 12-17) (Lc. 19, 45-48), es obvio que este acto no lo hizo Jesús solo tuvo que hacerlo con ayuda de todos sus seguidores que debieron ser algunas decenas de personas armadas, porque si leemos más adelante en el capítulo 22 de Lucas; Jesús después de haber anunciado la negación de Pedro acabada la ultima cena les dice a sus discípulos: “Cuando os envié sin bolsa, sin alforja y sin calzado ¿Os falto algo? Ellos dijeron: Nada. Y les dijo: Pues ahora, el que tiene alforja, tómela, y también la alforja; y el que no tiene espada, venda su capa y compre una. Porque os digo que es necesario que se cumpla todavía en mi aquello que está escrito: Y fue contado con los inicuos; por lo que está escrito en mí, tiene cumplimiento. Entonces ellos dijeron: Señor aquí hay dos espadas. Y él les dijo: Basta.” (Lc. 22, 35-38)   ¿Cómo podría explicarse una reacción violenta en un personaje de connotaciones nobles y pacificas como lo leemos en cada uno de los pasajes de los evangelios  canónicos? Algunos historiadores están convencidos que Jesús no solamente era un líder espiritual sino también un líder político con las características del mesías que esperaban los Judíos según anunciaron los antiguos profetas. Juan José Benites, conocido periodista y escritor español, piensa en cambio todo lo contrario y encasilla a Jesús como un personaje pacífico y un mesías diferente al de las profecías, era pues un mensajero de paz; en su Saga “Caballo de Troya” tiene una versión diferente en las acciones que se suscitaron en el templo en la que los evangelistas llaman “La Purificación del Templo”; según él, Jesús no tuvo necesidad de hacer uso de la violencia en este episodio; para ahuyentar a los mercaderes y cambistas del templo se fue hacia el establo donde estaban los animales que iban a ser sacrificados en el templo, muchos de ellos eran bueyes, abrió la alberca y los espanto hacia el lugar donde se encontraban los vendedores y cambistas, siendo las bestias quienes hicieron el  trabajo sucio del alboroto y destrozo y medio en esa zona (“Caballo de Troya” LibroI, Pág. 112) . Respecto a la acción de Jesús que según los evangelistas llaman “La Purificación del Templo” todo hace indicar que la realización de este acto de violencia  no estaba en los planes de Jesús, sino que se vio obligado por las circunstancias ajenas a sus verdaderas intenciones, por los acontecimientos acaecidos días anteriores y que no son contados por los evangelistas, la clave está en Barrabas  el sedicioso o zelote que fue capturado tras una revuelta en las afueras de la ciudad; días antes de los actos violentos en el templo. Robert Ambelain en su obra “Jesús o el Secreto Mortal de Los Templarios” considera que  el nombre en mención tiene varias significaciones:  
 

1-Bar-rabba      Hijo del doctor

2-Bar-rabban    Hijo de nuestro doctor

3-Bar-Abba        Hijo del Padre

4-Bar-Abban      Hijo de nuestro Padre

5-Bar-Abba        Hijo de Abba

Ambelain se inclina por la tercera denominación es decir “Hijo del Padre”, término empleado por Jesús  con mucha frecuencia refiriéndose a sí mismo; y da como fuente a Orígenes quien vivió hacia la primera mitad del siglo III y hacía alusión del sobrenombre de Jesús como Bar-Abbas, teniendo como referencia de textos muy antiguos que obraban en su poder donde denominaban al mesías como Jesús-Barrabas o Jesús el hijo del Padre. Siguiendo el razonamiento de Ambelain (quien toma el  argumento central de Daniel Masse, Juez Frances que en el año 1926 publico el “El enigma de Jesucristo” donde manifiesta que Jesús fue el hijo mayor del Judas el Galileo, fundador de Los Kannain, que era una secta integrista y nacionalista que luchaban por su independencia del sometimiento romano y además Ambelain  lo perfecciona y agrega varios argumentos más a la luz de los hallazgos arqueológicos más importantes del siglo XX como son los Rollos del Mar Muertos y los evangelios Apócrifos de Nag Hammadi),    Jesús tenía entre sus discípulos miembros que pertenecían a esta secta, así tenemos a Simón el celador (apodo  que trata de esconder el termino Zelote que era la traducción griega del arameo Kannain), Natanael el cananeo (aquí también nos indica que se trata de ocultar la palabra aramea Kannain) y el mismo Judas Iscariote cuyo sobrenombre no proviene, como dice Ernesto Renán, de Kerith, que era una ciudad ubicada al extremo sur de la tribu de Judá (“Vida de Jesús” por Ernesto Renán pag.149) Iscariote fue una mala traducción griega de Sicarius que ellos denominaron Sikariotes, los sicarius eran un grupo de zelotes que usaban con destreza la sica que era una daga o puñal de punta curvada que fácilmente ocultaban en los pliegues de la toga o bajo la capa; que según parece provenia de una secta de Zelotes denominados “Los Sicarios” o “los hijos de la daga” y los romanos los tenían como muy peligrosos cuando eran emboscados por los zelotes ya que usaban estas armas con mucha destreza; en el enfrentamiento cuerpo a cuerpo fácilmente los sicarios destripaban a su oponente; por esta razón los hechos acaecidos en lo que los evangelistas llaman “La Purificación del Templo” no fue otra cosa que un levantamiento armado de los Zelotes a la cabeza de su líder Jesús; no tuvo el éxito que esperaba por lo que tuvieron que ocultarse  en un lugar secreto de reunión conocido como el Monte de Los Olivos o también con el nombre Getsemaní. Lugar donde luego fueron sorprendidos por la cohorte  romana, gracias a la traición de Judas Iscariote. (“Jesús o el Secreto Mortal de los Templarios” por  Robert Ambelain Capitulo 19 “El Acta de acusación de Jesús” Ediciones Martínez Roca, Barcelona-España 1982).

Sin embargo yo me inclino por la segunda denominación a que hace referencia Robert Ambelain esto es Bar-Rabban, que quiere decir “Hijo de Nuestro Doctor”, el mismo Robert Ambelain en su Obra “Secretos del Gólgota” hace manifiesto esa segunda  posibilidad; me pregunto ¿A quiénes denominaban los judíos doctores? Pues esta denominación los hacían a aquellas personas versadas y conocedoras de las leyes de la Tora y además eran sus intérpretes, estos eran los rabonis o rabinos (traducidos al latín) sino recordemos en Juan Cap. 20, versículos del 11 al 16: “Pero María (Magdalena) estaba llorando junto al sepulcro; y mientras lloraba, se inclinó para mirar dentro del sepulcro; y vio dos ángeles con vestiduras blancas, que estaban sentados  el uno a la cabecera y el otro a los pies, donde el cuerpo de Jesús había sido puesto.  Y le dijeron: Mujer ¿Por qué lloras? Les dijo: Porque se han llevado el cuerpo de mi señor; y no sé dónde le han puesto. Cuando había dicho esto, se volvió y vio a Jesús que estaba allí; mas no sabía que era Jesús. Jesús le  dijo: Mujer ¿Por qué lloras? ¿A quién buscas? Ella pensando que era el hortelano le dijo: Señor si tú lo has llevado, dime donde lo has puesto, y yo lo llevare.

 

 
 Jesús le dijo: ¡María!  Ella volviéndose, le dijo: ¡Raboni!” Lo que quiere decir que Jesús para sus seguidores y discípulos era “Nuestro Doctor” o nuestro Rabino o Raboni, entonces al referirse del  “Hijo de nuestro doctor” se referían al hijo de Jesús, que cayó junto a otros a manos de los soldados romanos tras una revuelta a las afueras de la ciudad. ¿Cómo sucedió esto? Es indudable que el maestro Jesús estaba ajeno a los planes de sus jóvenes seguidores, sucede que Judas Iscariote, que era uno de los más exaltados zelotes,  cuando presencio el recibimiento apoteósico a su entrada a Jerusalén por varios de sus seguidores todos ellos galileos y algunos de Judea que ya conocían de sus hechos de profeta; pensó que era el momento que se manifestara como el mesías esperado pero vio un momento de debilidad en su Maestro cuando cerca de la ciudad lloro cerca de ella (Lc. 19; 42-44)  diciendo: “!Oh!, si también tu conocieses , a lo menos en este día, lo que es para tu paz! Mas ahora esta encubierto de tus ojos. Porque vendrán días sobre ti , cuando tus enemigos te rodearan con vallado, y te sitiaran, y por todas partes te estrecharan, y te derribaran a  tierra, y  a tus hijos dentro de ti, y no dejaran en ti piedra sobre piedra, por cuanto no conociste el tiempo de tu visitación.” Sus discípulos se quedaron algo consternados más Judas Iscariote   creyó conveniente tomar la delantera en acciones sediciosas para dar el impulsos al destino mesiánico de su maestro, por eso reunió a los jóvenes de la comunidad que seguía a Jesús y que estaban a cargo de Jacobo, el hermano del señor, para su adiestramientos en defensa y ataque con el uso de la daga y la espada; es más Jesús contaba con dos personas encargadas en su seguridad, eran zelotes experimentados en acciones de combate cuerpo a cuerpo, sin embargo Jesús desde que inició su vida pública como predicador ya había ordenado entre sus seguidores zelotas ninguna acción   armada contra la soldadesca romana o  Herodianas; sin embargo Judas en un acto de desacato convenció a los jóvenes a efectuar una acción de asalto a una cuadrilla de soldados romanos que acompañaban al recaudador de impuestos que venían de las campiñas cercanas y tenían sus arcas llenas en sus carrozas, tal como era costumbre de los zelotes sorprendieron a la cuadrilla en un ataque de asalto para intentar llevarse consigo el  producto de los impuestos pero no contaban que en la retaguardia venían otro grupo de soldados de develaron el ataque y capturaron a muchos sediciosos, escapándose Judas Iscariote; entre los capturados estaba obviamente del Hijo de nuestro Rabino o Jesús Bar-Rabban. Judas comunicó a Jesús y su comitiva que se hallaban en Betania sobre lo acontecido, y tal fue la molestia del  Jesús por ese acto inconsulto y de indisciplina que sanciono a Judas Iscariote con el alejamiento momentáneo de la comunidad haciendo que dos de sus discípulos lo llevaran custodiados en el Huerto de los Olivos, que era el escondite de Jesús y los suyos; mientras el Mesías galileo elaboraba un plan de rescate, porque sabía que los romanos en un sumario juicio a los insurrectos los condenaba a muerte en crucifixión. El plan consistía en crear confusión en un ataque sorpresa al templo para acaparar la atención de la soldadesca romana mientras otro grupo iba al rescate de los condenados que estaban en camino al lugar del calvario; esta acción tenía que ser simultanea; el plan resulto un éxito; Jesús ordenó a la mayoría de sus discípulos que tuvieron que ver con el acto de rescate de los sentenciados a muerte, a huir hacia las altas colinas cercanas al Mar Muerto donde se  ubicaban los esenios, comunidad con la cual guardaba estrecha relación; (esta actitud de los seguidores y discípulos de Jesús es manifestadas en los evangelios como que ellos por miedo y en un acto de cobardía abandonaron a su señor y se escondieron) mientras que el con su guardaespaldas llamados Dimas y Cystas  con Simón Pedro y Juan y la veintena de sus seguidores que armaron el alboroto en el templo se dirigieron hacia el Huerto de Los Olivos o Getsemaní; estando allí se entera de la huida de Judas Iscariote.               
 
 



Poncio Pilatos al enterrarse de los acontecimientos lleno de ira manda a llamar a los líderes judíos miembros de sanedrín y los amenaza de que si ellos no ayudaban a la captura de los insurrectos, principalmente de su líder la ira de Roma recaería sobre toda  Jerusalén; es obvio que los sacerdotes a la cabeza de Caifás y las aristocracia judía no les convenía tener de enemigos a Pilatos, ellos se mostraron siempre incondicionales con tal de no perder sus  privilegios; poco les interesaba la suerte del pueblo, ni mucho menos de aquellos que provenían de las provincias muy alejadas como Galilea o Samaria; es entonces cuando el sanedrín pone precio a la captura de Jefe de los ladrones y  delincuentes que asaltaron a los vendedores y cambistas en los alrededores del templo. Judas Iscariote al enterrarse de la recompensa por la captura del jefe de los revoltosos del templo decide revelar ante las autoridades el escondite y la identidad de Jesús, las intenciones de Judas por esta acción no está bien definida, algunos estudiosos bíblicos no creyentes creen que lo hizo con la intensión de crear una reacción adversa en el pueblo por dicha captura e incentivar una revuelta popular, para otros sin embargo la intensión de Judas fue la de ver actuar a Jesús como el Mesías que era y ante la posibilidad de su arresto reaccionara y se revelara con los poderes que Dios le asignaba como su enviado y derrotara a sus enemigos; para el Dr. Ariel Álvarez Valdés licenciado en Teología Bíblica por la Facultad Bíblica Franciscana de Jerusalén (Israel), y doctor en Teología Bíblica por la Universidad Pontificia de Salamanca (España), explica que el único evangelista que hace referencia de la entrega de las trece monedas es Mateo (Cap. 26; 14-16) que en realidad era una suma irrisoria,  cantidad que se pagaba por un esclavo muerto,  lo cual el relato de Mateo no es más que simbólico ya que el profeta Zacarías en el Capítulo 11, versículos 12 y 13 Jehová se molesta por que su pueblo le dio en ofrenda solamente trece monedas que era una cantidad muy insignificante para todas las bendiciones que él les había dado a raves del tiempo; interesante esta apreciación del Dr. Álvarez; sin embargo yo postulo la teoría que Judas se convence que Jesús no es el mesías esperado por los judíos y decide entregarlo por el interés económico de la recompensa, no por las trece monedas; claro está, sino por una suma mucho mayor ya que en Hechos de los Apóstoles se nos hace saber que “este (Judas Iscariote) con el salario de su iniquidad adquirió un campo”(Hch. 1; 18) de sembrío que seguramente tendría un valor superior a la de las treinta monedas;   Jesús se entera de la traición de Judas Iscariote esto a través de uno de sus seguidores que va de  espía a la ciudad y ve salir a Judas Iscariote con una cuadrilla romana; ¿Por qué la presencia de Judas Iscariote junto con la cuadrilla romana? Porque ellos no conocían al líder de la revuelta en el Templo, ya que era habitual entre los zelotes cubrir sus rostros en acciones armadas de sorpresa  y Judas  iba con ellos para identificarlo. Ante estos hechos Jesús decide entonces no poner en riesgo la vida de su gente y ordena que huyan del lugar y  con engaños les hace creer que les daría pronto alcance, se aparta del grupo acompañado solamente de Dimas y Cystas y se alejan siguiendo la senda donde sabía que vendrían los soldados romanos guiados por Judas Iscariote con intención de ser capturado en compañía de sus fieles guardaespaldas, que ya sabían de la intención de su líder y lo acompañan en su decisión, cuál era la de ofrendar su vida y evitar la muerte de todos sus seguidores . Por tanto Jesús conjuntamente con sus fieles guardaespaldas son juzgados por los Romanos y ejecutados por ellos bajo la orden de Poncio Pilatos como salteador y ladrón, no como sedicioso de lo contrario hubiera sido crucificado cabeza abajo, sin embargo fue crucificado cabeza arriba; Robert Ambelain nos hace referencia en su libro  “Jesús o el Secreto Mortal de los Templarios” un texto de Seneca que dice: “Había dos formas de crucificar; para los sediciosos la crucifixión era cabeza abajo y para los malhechores eran crucificados cabeza arriba”  y reafirmado por Eusebio de Cesarea en su Obra Historia Eclesiástica escribe: “ …;otros por último, fueron crucificados, unos de la manera usual para los malhechores; otros de una forma peor,  puesto que fueron clavados cabeza abajo…” (pag.208 R. Ambelain, Jesus o el Secreto Mortal de los Templarios España 1982; Ediciones Martínez Roca).   Todo lo que se nos cuenta en los evangelios sobre el juicio de Jesús es totalmente fantasioso y lleno de incoherencia, se nos dice que el sanedrín, en un juicio inusual a sus costumbres lo presenta ante Pilatos y para asombro de quienes conocemos de historia nos muestran a un Prefecto Romano bonachón  que por todos los medios trata de salvar  la vida de Jesús; este no era la personalidad de Poncio Pilatos según lo sabemos por Historiadores de la época como Flavio Josefo, Plinio el Joven, Tácito; al respecto el filósofo alejandrino Filón el judío: en su obra Legatione ad Gaium pagina 301 lo describe como “por naturaleza rígido y porfiadamente duro” y “de naturaleza rencorosa y hombre excesivamente iracundo”; comenta también de “los sobornos, los actos de soberbia, los actos de violencia, los ultrajes, los casos de tratamiento basados en el rencor, los constantes asesinatos sin juicio, la incesante y sumamente agravante brutalidad” de los que podían acusarlo los judíos ante el emperador, lo que al final ocurriría. Poncio Pilatos odiaba a los Judíos y en la vida se iba a dejar manejar por los sumos sacerdotes como se nos lo cuentan en los evangelios e inclusive se nos narra una supuesta  tradición de fiesta de Pascua de conmutar la pena de un reo, esa supuesta tradición nunca existió, el intercambio de Barrabas un sedicioso zelota por la de Jesús a quien el prefecto no veía culpa alguna es algo que un historiador ajeno a toda influencia religiosa no se lo cree ¿Cómo podría un Prefecto Romano que representaba al Cesar dejar libre a un líder  zelota, enemigo de Roma por un hombre  en quien no veía culpa alguna inocente? John Dominic Crossan, una de las eminentes autoridades en los que se llama historiografía del Nuevo Testamento, en su Obra “Jesús: Biografía revolucionaria” nos dice lo siguiente sobre este asunto: “A mi juicio, todo este episodio (sobre el juicio de Jesús) es absolutamente anti histórico, y lo más probable es que se trate de una invención de Marcos. Dos son los motivos en los que me baso. Uno es que la imagen que ofrece de Pilato, en exceso condescendiente con el griterío de las turbas, es justamente la contraria de la que conocemos por los relatos de Josefo. Su especialidad  era precisamente el control brutal de las multitudes. El segundo es que esa costumbre de la amnistía sin restricciones, de liberar a cualquier preso que solicitara el pueblo, con motivo de la festividad de la pascua, iría contra los dictados de la más elemental prudencia administrativa.”  (pag. 159; “Jesús; Biografía Revolucionaria” por John Dominica Crossan; Ediciones Grijaldo  Mondadori, Barcelona-España, 1996) 
 

¿Qué edad tendría Jesús cuando fue crucificado?

Para muchos les parecerá hasta escandaloso la afirmación que hago que Jesús tuvo un hijo, llamado Jesús Bar-Rabban; es también seguro que no fue el único hijo. Debemos mentalizarnos que Jesús ante todo profeso el judaísmo como su fe religiosa, vivió como un judío del siglo I con todas las costumbres de su época y sería imposible que a la edad madura de treinta años (como se nos lo dice en todas las Iglesias Cristianas) estuviera soltero y mas aun siendo considerado como un rabino; es seguro que Jesús se casó cuando menos a los veintiún anos con una joven palestina de quince o dieciséis años. Esa era la costumbre; un hombre de treinta años soltero podría ser considerado hasta homosexual y ser separado de la comunidad; por otro lado los únicos en esa época que si hacían voto de celibato eran los esenios que se dedicaban al  monasterio, pero ellos ya hacía muchos años que se habían separado del judaísmo oficial, es muy posible que Jesús tuviera contacto con esta comunidad pero lo que es seguro es que no perteneció a ella;  pero si hablamos de que Jesús tenía un hijo joven de más o menos veinte años de seguro que él tendría más de los treinta y tres años que se nos hace creer que tuvo cuando murió; de los cuatro evangelistas canónicos el único que hace mención de la edad de treinta años que tenía Jesús cuando inicio su vida pública es Lucas y según este mismo evangelista; así como los otros dos evangelistas sinópticos Marcos y Mateo; esa vida pública duro a lo sumo un año porque solamente nos hace saber de una sola visita a Jerusalén justamente previos a las fiestas de la pascua judía donde luego fue crucificado, o sea que habría muerto a los treinta y un año de edad; en cambio Juan es el único que hace referencia de tres visitas de Jesús a Jerusalén para las fiestas de pascua con lo que nos indica que su vida pública dura al menos tres años, tanto Marcos, como Mateo y Juan no nos dicen nada de la edad de Jesus, sin embargo en Juan hay un pasaje  bíblico (cap. 8, 52-56) cuando los judíos cuestionan a Jesús por decir que “... el que guarda mi palabra, nunca vera muerte.” Y ellos le recriminan diciendo: 53. “¿Eres acaso mayor que nuestro padre Abraham, el cual murió? ¡Y los profetas murieron! ¿Quién te haces a ti mismo?” 54.”Respondio Jesús: Si yo me glorifico a mí mismo, mi gloria nada es; mi padre es el que me glorifica, el que vosotros decís que es vuestro Dios.”  55. “Pero vosotros no lo conocéis, más yo lo conozco, y si dijese que no lo conozco, seria mentiroso como vosotros; pero lo conozco y guardo su palabra.” 56. “Abraham vuestro padre se gozó de que había de ver mi día y lo vio y se gozó.” 57. “Entonces le dijeron los judíos: Aun no tienes cincuenta años, ¿Y has visto a Abraham?”.     
En este texto del evangelio según Juan nos hace ver que Jesús bordeaba los cincuenta años cuando estaba en pleno magisterio, y esto es corroborado por San Ireneo discípulo de San Policarpo (uno de los cuatro padres Apostólicos que conocieron a los Discípulos de Jesús) quien sostiene que: “….Jesús tenía más de cincuenta años cuando ensenaba.” “Murió a una edad que lindaba con los cincuenta años y en el umbral de la vejez.”
 

La quinta filosofía

Lo que sí parece seguro que Jesús crea una quinta filosofía entre los judíos esto es el de Los Nazarenos; pues recordemos que Flavio Josefo en su Libro Guerra de los Judíos hace mención de cuatro filosofías en el siglo I estos son, los Saduceos, los Fariseos, los Esenios y los Zelotes. No hace mención de los Nazarenos, porque era una filosofía muy nueva cuya difusión no era muy conocida cuando Flavio Josefo escribió su “Antiguedades Judaicas” y  "Guerra de los Judios". Los Nazarenos si creían en la divinidad de Jesús pero no se apartaron del judaísmo pues se mantuvieron fieles a sus tradiciones. Es sabido que Saulo de Tarso o Pablo que perteneció  a las comunidades dirigidas por los discípulos de Jesús, estando a la cabeza Jacobo el hermano del señor, tuvo luego serias desavenencias con este y los demás discípulos de Jesús  respecto a la orientación que se debería dar a las enseñanzas emanadas de Jesús durante su magisterio; el autor de Hechos de Los Apóstoles (Seguramente Lucas quien fue fiel discípulo de Saulo de Tarso) en el Cap. 21 versículos 17-24, trata de suavizar el último encuentro entre estos dos personajes, según en este pasaje de Hechos de Los Apsótoles Pablo es llamado a comparecer ante Jacobo  en Jerusalén  quien le dice: “Pero se les ha informado en cuanto a ti, que enseñas a todos los judíos que están entre los gentiles a apostatar de Moisés, diciéndoles que no circunciden a sus hijos, ni observen las costumbre,” y como   muestra de fidelidad de parte de Saulo o Pablo  se le ordena a que acompañe a cuatro jóvenes al templo y pague los gastos para que se rasuren la cabeza como parte de un ritual para el cumplimiento de un voto; nos preguntamos ¿Qué tipo de voto era al que sometían aquellos jóvenes? Este era un ritual para todos aquellos jóvenes que elegían ser consagrados a Dios por un periodo de tres años durante el cual dejaban crecer la cabellera sin volver a cortársela hasta cumplir el periodo del Nazaerato.  Este tipo de ritual lo hacían solamente los Nazarenos. Pero entonces deberíamos preguntarnos quienes eran los nazarenos;  los “Netzarím” (en Hebreo) eran llamados así por que tomaban los votos a ser consagrados a Dios, pero también la palabra Nazareno deriva de la palabra hebrea “Nazara” que quiere decir “estar en la verdad” Jesús es llamado “La Verdad”:  Juan  14:6  “Yo soy el Camino, la Verdad y la Vida”.   Los creyentes en Jesús se proclaman seguidores de “la verdad”:   1 Juan 3:19  “y en esto conocemos que somos de la verdad, y aseguramos nuestros corazones delante de él”. En otro pasaje de Mateo 2:23 se dice: “Habiendo llegado, habitó en la ciudad que se llama Nazaret. Así se cumplió lo dicho por medio de los profetas, que había de ser llamado nazareno”. No se sabe con exactitud que profeta del Antiguo Testamento dijo esto, todo parece indicar que es una interpretación equivocada del libro de Isaías 11:1 “Un retoño brotará del tronco de Isaí, y un vástago de sus raíces dará fruto” donde retoño es netzer en Hebreo y Jueces 13:5 “porque he aquí que concebirás y darás a luz un hijo sobre cuya cabeza no pasará navaja porque el niño será nazareo de Dios desde el vientre de su madre”, en este ejemplo, nazareo, que como ya mencionamos es una interpretación de la palabra hebrea “netzarim” significa separado para Dios para que el elegido se consagre de lleno al estudio de las escrituras y se dedique por completo al servicio de Dios en oraciones y sacrificios.  Seguramente los escribas de entre los siglos II y IV cuando tradujeron en el término Jesús Nazareno; pensaron que Nazareno se refería por la ciudad de procedencia, ya que ellos eran latinos y no conocían los territorios palestinos; entonces creyeron que habría existido una ciudad llamada Nazaret; en realidad no se sabe con exactitud que existiera una ciudad con ese nombre en la época de Jesús e inclusive los años que siguieron hasta la guerra de los judíos contra los romanos en el año 67 EC; Flavio Josefo que nos narra con lujo de detalles este acontecimiento y que estuvo a cargo de la resistencia judía en Galilea refiere como organizo la resistencia en los siguientes términos: “…sabiendo que los romanos ciertamente habían de venir a Galilea, mando (Josefo) cercar los muros de las ciudades que más oportunas y cómodas para defenderse le parecieron: fueron de ellas Jotapata, Bersabea, Salamina, Perecho, Jafa, Sigofa y un monte que se llama Itaburio, y a Tarichea y Tiberiada; fortaleció también las cuevas que hay cerca del lago de Genesareth, en la Galilea que llamaban Inferior. En la Galilea  que llamaban superior mando a fortalecer a Petra, que se llama Achabroro, a Sefa, Jamnita y a Mero. En la región Gualanitide, Seleucia, Sogana y Gamala y permitió a los seforistas (Seforis) que ellos mismos se edificasen muros, porque sabía que tenían poder y riqueza para ello, y ver también que estaban más pronto para la guerra aun sin ser mandados. Juan, hijo de Levia, también cerco por si de muro a Giscala por mandado de Josefo; todos los otros caitillos eran visitados por Josefo, mandando juntamente lo que convenía, y ayudándolos para ello.” (pag. 58-59; “Guerra de los Judíos” libro II, capitulo XXV) como se puede apreciar Josefo hace mención de todas las ciudades grandes e importantes existentes en esa época inclusive al mencionar a Seforis que está a cinco kilómetros de Nazaret no la menciona, lo  que nos supondría deducir que no existía o que tan solo se trataba de un caserío de campesinos, muy lejos de ser una ciudad importante por lo tanto no tenía una sinagoga contradiciendo lo que nos dice el evangelio de Marcos: “Salió Jesús de allí y vino a su tierra y le seguían sus discípulos. Y llegado el día de reposo, comenzó a enseñar en la sinagoga; y muchos, oyéndole, se admiraban,…” (Mc. 6; 1,2) entonces el evangelista describe otra ciudad lo mismo que Lucas que al continuar el mismo relato de la visita de Jesús a Nazaret donde sus habitantes quisieron echarlo fuera de la ciudad por haber dicho en la sinagoga que la profecía de la venida del Mesías en el libro de Isaías se cumplía en el; el evangelista nos dice: “y le llevaron hasta la cumbre del monte sobre el cual estaba edificada la ciudad de ellos,..” (Lc.4; 29) y que se sepa la actual ciudad de Nazaret no está ubicada sobre una cumbre mas todo lo contrario esta sobre un llano; Reza Asilan, profesor de la Universidad de California en Riverside, con doctorado en “Historia de las Religiones” imagina la Nazaret del siglo I en los siguientes términos: “La antigua Nazaret descansa en la abrupta falda de una ventosa colina de la  baja Galilea. En este pequeño pueblo no viven más de cien familias judías. No hay carreteras ni edificios públicos. No hay sinagoga. La población comparte una sola fuente de donde se extrae agua fresca. Un solo baño, alimentado por un chorro de agua de lluvia recogida y almacenada en cisternas subterráneas, sirva a toda la población. Es un pueblecito de campesinos, en su mayoría analfabetos y jornaleros, un sitio que no figura ningún mapa.”(pag.59, “El Zelote, la vida y la época de Jesús de Nazaret “Ediciones Urano, Bacelona-Espana, 2014).  En esta descripción Aslan trata de conciliar la descripción bíblica de Nazaret con las características de la ubicación de la Nazaret actual situada sobre una pequeña elevación; sin embargo no llega a la verdadera descripción hecha por Lucas; Robert Ambelain nos da la clave de la verdadera ciudad descrita por los evangelista, se trata de Gamala  ubicada en la cima de una de las elevaciones con la que da inicio las montañas del Golán hacía el este; por debajo de esta población y hacía el oeste a unos cinco kilómetros se divisa el  lago de Genesareth, la ciudad natal de Judas el Galileo fue Gamala, interesante deducción que hablaremos en otro momento; sin embargo el hecho de considerar a Nazaret como un pequeño caserío de campesinos hace analizar algunos autores contemporáneos de que  Jesús era un campesino  analfabeto (John Dominic Crossan, Reza  Aslan y otros) y que mas bien fue un predicador intuitivo y que aprendio de memoria, como era la costumbre de la epoca entre los judios, los textos de la Tora que se leian en la sinagogas; estos autores fundamentan sus argumentos por el hecho de que Jesus no dejo nada de su doctrina por escrito; en lo personal yo tengo otra conceptualización respecto a la educación que recibió Jesús, porque de hecho no nació ni creció en un caserío sino en una ciudad; donde tuvo acceso a la educación regular que se daban a los niños, es mas de joven tuvo contacto con los esenios de quienes aprendió de ellos muchos conceptos teológicos; además en los llamados años ocultos de Jesús (donde los evangelios no nos dicen nada) es seguro que tuvo la ocasión de viajar a Alejandría, el centro cultural de la época, y que habría tenido contacto con el sabio Filón de Alejandría, ya que muchos de los aforismos de Jesús también son mencionados en los escritos de este ilustre sabio alejandrino, en otra ocasión hablaremos sobre estos los años ocultos de Jesús.    Aquellos que tomaban el nazaerato de por vida nunca pasaban navaja sobre su cabellera ¿Por qué razón ilustramos la figura de Jesús con la cabellera larga? Ninguna de las crónicas evangélicas describe físicamente como era Jesús, sin embargo en algún momento en que se iban formando varias congregaciones en torno de la figura de Jesús algún artista cristiano de comienzos del siglo II dibujo a Jesús con las características  físicas conocidas actualmente, seguramente porque aún existía la tradición que Jacobo o el hermano del señor fue un Nazareno y que nunca se cortó la cabellera.  Las desavenencias de Pablo con los discípulos de Jesús, eran continuas y Pablo para darse cierta importancia inventa la visión y el llamado de Jesús quien le confiere el apostolado para que difunda su mensaje a los paganos y por si fuera poco reniega de los discípulos en 2 Corintios 11, 12-13 cuando dice: “Mas lo que hago, lo hare aun, para quitar la ocasión a aquellos que la desean, a fin de que en aquello de que se glorían, sean hallados semejantes a nosotros.” “Porque estos son falsos apóstoles, obreros fraudulentos, que se disfrazan de apóstoles de cristo.” Ya anteriormente Jacobo o Santiago el hermano del señor, había enviado a algunos discípulos a los lugares donde Pablo había organizado nuevas comunidades para constatar si sus enseñanzas estaban de acuerdo a lo que habían dispuesto los apóstoles  según  el  legado  de  Jesús (Hch 15), esto molesto mucho a Pablo tanto así que en Gálatas 2, 4-6; dice: “y esto a pesar de los falsos hermanos introducidos a escondidas, que estaban para espiar nuestra libertad que tenemos en Cristo Jesús, para reducirnos a esclavitud, a los cuales ni por un momento accedimos a someternos, para que la verdad del evangelio permaneciese con vosotros. Pero de los que tenían reputación de ser algo (lo que hayan sido en otro tiempo nada me importa; Dios no hace acepción de personas) a mí los de reputación nada nuevo me comunicaron.” Esto indudablemente va dirigido a los apóstoles dirigidos por Santiago. Por eso digo quien no más que Jacobo o Santiago el hermano carnal de Jesús quien estaba más al tanto de la verdadera orientación de la doctrina del mesías galileo. En otro pasaje en Hechos Cap. 24, ver. 5, cuando Pablo es juzgado ante el gobernador Félix, el sacerdote Ananías haciendo de acusador en contra de Pablo dice: “Porque hemos hallado que este hombre es una plaga y promotor de sediciones entre todos los judíos por todo el mundo y cabecilla de la secta de los nazarenos” como se puede apreciar es así como conocían a los discípulos de Jesús y lo incluyen a Pablo porque por ese tiempo aun andaba con los discípulos. Cuando Pablo fue llevado a Roma es cuando definitivamente se aparta de los apóstoles y crea su propia comunidad con  un contenido teológico distinto de las enseñanzas de Jesús, apartándose de toda costumbre judía.  La ideología de Pablo respecto a la doctrina de Jesús orientada a los no judíos, se hace más accesible a los romanos; es por ello que en el Concilio de Nicea en el año 325 EC es el cristianismo Paulista el que se impone por ser el más conveniente para los intereses del Emperador Constantino; ya por ese entonces existía entre los cristianos paulista un gran antisemitismo visceral porque consideraban que los Judíos fueron los responsables directos de la muerte de Jesús, exculpando de toda culpa a los Romanos; es muy probable que Constantino contribuyo en ese sentido, haciendo retirar de los evangelios canónicos cualquier vestigio, que culpara a las autoridades romanas de entonces de la muerte de Jesús. ¿Cómo se iba a difundir una religión entre los romanos cuando su Dios hecho hombre fue muerto por ellos mismos? Eso carecería de toda lógica; así que eliminan todo escrito en ese sentido y muy posible que modificaron también los escritos evangélicos bajo la vigilancia de Eusebio de Cesarea. Tanto así que el mismo Eusebio de Cesarea cuando en su Historia Eclesiástica pone en mención lo escrito por Josefo sobre los hechos de la guerra de los Judíos con los Romanos entre los años 67 y 73 EC comenta  finalmente que “de este modo, pues la Justicia de Dios, perseguía a los Judíos por sus crímenes contra Cristo” (pag.28 Libro II “Historia Eclecuastica”).  Reza Aslan, académico en Historiografía de Nuevo Testamento, en su obra “El Zelote” comenta sobre el juicio de Jesús redactado en Marcos Cap. 15 vers. 1-20 en los siguientes términos: “…un relato inventado por Marcos, con propósitos estrictamente evangelizadores, para absolver a Roma de toda culpa por la muerte de Jesús, se amplía hasta el punto del absurdo, convirtiéndose con el transcurso del tiempo en la base para dos mil años de antisemitismo cristiano” (pg. 181, “El Zelote; La vida y la época e Jesús de Nazaret”, Ediciones Urano SA, Barcelona-España; 2014).




 Pues no le falta razón, el pueblo judío durante la llamada época de la diáspora, estaban distribuidos en prosperas comunidades en toda Europa, sin embargo siempre fueron el blanco de los ataques de la nefasta institución creada por la Iglesia de Roma conocida como “La Santa Inquisición” que de santa no tuvo nada, más bien fue una maquinaria de tortura y muerte, muchas familias judías seguramente pasaron por esta corte y para salvar sus vidas tuvieron que convertirse a la fe cristiana; otros que se mantuvieron fiel a sus creencias pasaron por la horrenda muerte en la pira.

Sin embargo el principal líder de la Reforma del siglo XVI Martin Lutero fue uno de los principales impulsores en la persecución de las comunidades judías en Alemania y los demás reinos cristianos; cuando publico su libro titulado “Los judíos y sus mentiras” en 1543 promovió acciones en contra de los judíos porque no creían en Jesús como su mesías y fueron sus ancestros quienes le dieron muerte en la cruz, por ello en el capítulo once del libro en mención expone algunas acciones violentas contra ellos justificándolos como un acto de  desagravio por lo que hicieron con Jesús, en los siguientes términos:

“Dado que viven con nosotros, no osamos tolerar su conducta ahora que estamos al tanto de sus mentiras, sus injurias y sus blasfemias… en primer lugar, debemos prender fuego a sus sinagogas o escuelas y enterrar y tapar con suciedad todo lo que no prendamos fuego, para que ningún hombre vuelva a ver de ellos piedra o ceniza."

"Esto ha de hacerse en honor a nuestro señor y a la cristiandad, de modo que Dios vea que nosotros somos cristianos y que no aprobamos ni toleramos, a sabiendas, tales mentiras, maldiciones y blasfemias a su hijo y a sus cristianos… en segundo lugar, también aconsejo que sus casas sean arrasadas y destruidas, porque en ellas persiguen los mismos fines que en sus sinagogas… en tercer lugar, aconsejo que sus libros de plegarias (sidurim) y escritos talmúdicos, por medio de los cuales se enseñan la idolatría, las mentiras, maldiciones y blasfemias, les sean quitados… en cuarto lugar, aconsejo que de ahora en adelante se les prohíba a los rabinos enseñar sobre el dolor de la perdida de la vida o extremidad… en quinto lugar, que la protección en los caminos sea abolida completamente para los judíos. no tienen nada que hacer en las afueras de las ciudades dado que no son señores, funcionarios, comerciantes, ni nada por el estilo… en sexto lugar, aconsejo que se les prohíba la usura, y que se les quite todo el dinero y todas las riquezas en plata y oro, y que luego todo esto sea guardado en lugar seguro… en séptimo lugar, recomiendo poner o un mayal o una hacha o una azada o una pala o una rueca o un huso en las manos de judíos y judías jóvenes y fuertes y dejar que coman el pan con el sudor de su rostro, como se le impuso a los hijos de Adán.”
Muchos historiadores contemporáneos, entre ellos el historiador jesuita Paul Johnson, no tienen ni la menor duda que la obra de Lutero fue el “primer trabajo antisemita moderno y un paso gigantesco en el camino hacia el Holocausto”. En la Segunda Guerra Mundial cuando los alemanes crearon los famosos campos de concentración donde tuvieron en condición de presos a los judíos y que dichos campos no eran otra cosa que lugares de exterminio humano, todas las iglesias de la cristiandad no alzaron su voz de protesta ante un crimen de lesa humanidad; seguramente con la misma sesgada mentalidad tradicional de que se trataba de un castigo divino por ser ellos, los judíos, los que dieron muerte a Jesús; hoy sabemos que toda esa creencia es tan falsa y aseguramos históricamente que la muerte del mesías galileo fue exclusivamente a manos de las autoridades romanas de entonces y por las razones explicadas líneas arriba, obviamente en complicidad con las autoridades judías mas no del pueblo judío que seguramente lo admiraban y muchos eran sus seguidores y creyentes en su mensaje de amor y justicia. El 27 de Enero del 2011 en conmemoración de las Víctimas del Holocausto de Auschwitz-Birkenau y  quizás como  un acto de “mea culpa”, el papa Juan Pablo II; quien en numerosas ocasiones reflexionó sobre el tema;  señaló: “por demasiado tiempo han circulado interpretaciones erróneas e injustas del Nuevo Testamento sobre los Judíos y su supuesta culpabilidad por la muerte de nuestro Señor Jesucristo y pueden haber generado sentimientos antijudíos en algunas mentes y corazones de cristianos”…. En la Segunda Guerra Mundial cuando los alemanes crearon los famosos campos de concentración donde tuvieron en condición de presos a los judíos y que dichos campos no eran otra cosa que lugares de exterminio humano, todas las iglesias de la cristiandad no alzaron su voz de protesta ante un crimen de lesa humanidad; seguramente con la misma sesgada mentalidad tradicional de que se trataba de un castigo divino por ser ellos, los judíos, los que dieron muerte a Jesús; hoy sabemos que toda esa creencia es tan falsa y aseguramos históricamente que la muerte del mesías galileo fue exclusivamente a manos de las autoridades romanas de entonces y por las razones explicadas líneas arriba, obviamente en complicidad con las autoridades judías mas no del pueblo judío que seguramente admiraban a Jesús y muchos eran sus seguidores y creyentes en su mensaje de amor y justicia. El 27 de Enero del 2011 en conmemoración de las Víctimas del Holocausto de Auschwitz-Birkenau y  quizás como  un acto de “mea culpa”, el papa Juan Pablo II; quien en numerosas ocasiones reflexionó sobre el tema;  señaló: “Auschwitz (campo de exterminio construido en 1940 por los Nazis) no cesa de amonestarnos, aún en nuestros días, recordando que el antisemitismo es un gran pecado contra la humanidad; que todo odio racial acaba inevitablemente por llevar a la conculcación de la divinidad humana”. En la misma línea, el papa, Benedicto XVI, ha calificado el Holocausto “como una vergüenza indeleble en la historia de la humanidad”.